No es ningún secreto que Alexis Sánchez evita los micrófonos. Después de tres semanas en Belo Horizonte, era de los pocos jugadores que no había comparecido ante los medios de comunicación. Ayer jueves, a dos días del crucial duelo con Brasil, el “Niño Maravilla” apareció. Y no defraudó.
Escudado por su amigo Mauricio Isla, el barcelonista se presentó en la sala de reuniones habilitada para las ruedas de prensa en el recinto Toca de Raposa.
Sonriente y de buen humor, respondió todo lo que le preguntaron. Habló del fichaje de Claudio Bravo por el Barcelona, de la selección de Brasil, de la mentalidad del futbolista chileno, e incluso tuvo tiempo de bromear con una periodista alemana.
Buena parte del discurso de Alexis dio vueltas a un concepto central: creerse el cuento. Es la expresión que utilizó el delantero para explicar que los futbolistas chilenos deben convencerse de que están capacitados para luchar en igualdad de competiciones contra cualquier rival.
En su opinión, el futbolista chileno sufre una especie de complejo de inferioridad que le hace perder la fe cuando se enfrenta a equipos de primer nivel.
“El chileno nunca se ha tenido fe con los grandes jugadores y las potencias mundiales. Tenemos que tener todos la mentalidad de Gary Medel y Arturo Vidal”, dijo.
Alexis puso a sus dos compañeros como ejemplo de jugadores que no se arrugan ante nadie y creen en sus posibilidades.
“Estoy orgulloso de tener a Arturo en mi equipo porque es un perro en el medio del campo, sabe jugar muy bien la pelota. Y lo mismo Medel, que es un perro atrás y se cree el cuento, como no lo hace todo el mundo en Chile”, señaló.
Y luego habló de Isla, que lo observaba al lado. “Para mí es uno de los mejores laterales del mundo pero no se lo cree. Y yo le digo: ‘créete el cuento, que eres uno de los mejores’, pero hasta el día de hoy no se lo cree”, dijo ante un sorprendido Isla.
Un periodista le comentó a Alexis que parece realmente convencido de las opciones de Chile en este Mundial, a lo que el tocopillano respondió: “si no me veo convencido voy a la habitación, agarro la maleta y me voy para Chile”.
Al hablar de la selección brasileña, el delantero se mostró especialmente motivado por verse las caras con un rival de esa talla y con sus compañeros Dani Alves y Neymar.
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