Chile no tiene ningún temor y va por la Copa

La selección chilena rechazó los titulares de prensa que insinuaban que debería tenerle miedo a Argentina de cara a la final de la Copa América, a la cual la Roja llega con la ilusión de alzar por primera vez el trofeo americano.

“Pienso dejar atrás todo lo que circula a través de los medios, nosotros jamás hemos tenido miedo a otras selecciones, sí respeto a otros equipos, pero los titulares los han puesto ustedes”, dijo el golero Claudio Bravo ayer en conferencia de prensa, tras la práctica de Chile a dos días de la definición del torneo continental.

Medios de prensa publicaron en sendos titulares el temor que Chile debía tener hacia Argentina por la goleada que le propinó a Paraguay 6-1 en semifinales, lo cual fue rechazado por Bravo, quien aseguró, que el plantel está enfocado en el lance de mañana. “La final es un premio para quienes llevamos mucho tiempo en la selección, es un sentimiento de mucha felicidad, de que el trabajo que hemos realizado ha sido bueno”, afirmó el portero del poderoso FC Barcelona.

Bravo comandará a su selección en una final en la que no solo se juega el sueño de lograr la primera Copa América para Chile, sino también deberá ganarles a dos compañeros de la élite del Barcelona: Lionel Messi y Javier Mascherano.

“No es fácil, viendo su calidad y lo que ha hecho en su carrera, pero Argentina ha rendido de manera grupal y no individual”, afirmó Bravo, sobre Messi, la principal figura de Argentina, pero que tendrá en Mascherano al jefecito de la retaguardia albiceleste.

“Javier le da mucho carácter a su selección, es el corazón del equipo”, afirmó el arquero. Messi tiene la misión de alcanzar con Argentina un título, una deuda que la hinchada albiceleste pretende cobrarle para que de una vez por todas reedite en su selección los innumerables éxitos que ha logrado con el Barcelona.

Éste será el primer duelo de Bravo contra sus compañeros Messi y Mascherano, desde que llegó al Barcelona en junio pasado. Chile, a todos ojos llega con menores opciones para ganar ante una Argentina que viene de una fiesta tras golpear 6-1 a Paraguay en semifinales, partido en el que Messi y sus compañeros dieron muestras del real calibre.

La selección chilena se ampara en su capacidad por enfrentar a selecciones grandes, gracias a su habitual vértigo que presiona y domina al rival. “La historia nos dice que nunca hemos sido favoritos, pero estamos llenos de energía e ilusión”, declaró Bravo.

Roldán será el árbitro

Colombiano

El árbitro colombiano Wilmar Roldán dirigirá mañana la final entre Chile y Argentina.Roldán estará acompañado por sus compatriotas Alexander Guzmán, como primer asistente, y Cristian De la Cruz, como segundo, mientras que el cuarto árbitro será el venezolano José Argote.

La casi guerra

Con una de las fronteras conjuntas más extensas del mundo y a 37 años de haber estado a punto de batirse en una guerra, la final de la Copa recordó viejas rivalidades históricas. En 1978, Chile y Argentina, ambos gobernados por dictaduras, estuvieron a un paso de batirse en guerra por la posesión de las islas en el Canal de Beagle.

Es un deporte

“Ojalá que la gente entienda que el fútbol es un deporte, no una guerra”, lanzó el volante albiceleste Javier Mascherano. “Más allá de un partido disputado debe haber respeto”, coincidió el lateral chileno Eugenio Mena.

Ya son 99 años sin lograr el título copero

Chile quiere dejar atrás 99 años de fracasos y ganar su primera Copa América antes de que el centenario de este torneo de selecciones, el más antiguo del mundo, que se disputa desde 1916, lo alcance dentro del triste grupo de los países que nunca lo ganó. La selección chilena estrenó la Copa en 1916 en un partido con Uruguay, selección que a la postre sería la campeona de esta primera edición que organizó Argentina.

De ahí en más, Chile inició un camino de sufrimiento que casi cumple 100 años, y es que, en 37 participaciones en este torneo, jamás ha ganado el trofeo continental, un triste récord que comparte con Ecuador y Venezuela.

En ésta, la edición número 44 de la Copa América, el organizador del certamen, llega invicto a la final, con un empate y cuatro victorias, de la mano de un obsesivo técnico, el argentino Jorge Sampaoli, que tomó a su cargo a una generación dorada de futbolistas que están a punto de disputar el partido más importante de sus vidas. El Estadio Nacional, con capacidad para unos 45.000 espectadores y uno de los recintos que más partidos de Copa ha recibido (76), será el escenario de la final.