El Club de Deportes Cobresal, considerado uno de los más chicos de Chile frente a los poderosos, obtuvo hace una semana su primer título de Liga en sus 36 años de vida (Salvador, región de Atacama, 5 de mayo de 1979) y lo hizo de la mano del técnico Dalcio Víctor Giovagnoli, un conocido del fútbol boliviano, sobre todo por su paso por Wilstermann con el que salió campeón del primer torneo de 1998.
Ganar la corona fue considerado como un hito, más después del aluvión que castigó a la zona norte de ese país y obligó a que el campeón oficie de local durante varios partidos en Santiago, pues su estadio —El Cobre, con capacidad para tres veces más la población de El Salvador—no pudo ser utilizado por falta de agua potable en sus dependencias.
Las reparaciones culminaron justo para la jornada del 27 de abril, en la que Cobresal dio la vuelta olímpica ante su gente. Necesitaba ganar (lo hizo 3-2 frente al descendido Barnechea) y que Católica empatara o perdiera con Iquique. Se dio todo y Cobresal gritó campeón.
“Fue atípico, me contrataron en noviembre del año pasado para salvar el descenso. Sumamos puntos para conservar la categoría y cuando lo logramos reformulamos objetivos y comenzamos a luchar por el podio, nos ubicamos entre los tres primeros y luego arriba hasta coronar el objetivo”, dice Giovagnoli, cuyo contrato acaba este mes y está abierto a escuchar ofertas.
El temporal causó muchos estragos, el club también lo sintió, pero cuerpo técnico y jugadores se hicieron fuertes para aguantar las inclemencias del tiempo. “Lo que no mata fortalece, eso potenció al grupo que supo salir adelante. Todo el país quedó asombrado por esta situación, el diluvio afectó y el éxito de Cobresal conmovió al país”.
Fue en la penúltima jornada en la que Cobresal levantó el trofeo y el DT dice que se siente feliz por haber dado un tiempo de alegría a miles de personas que sufrieron por el temporal.
“La catástrofe fue muy grande, hubo mucha desgracia. La gente vino a El Salvador para ver a su equipo y le dimos al menos una alegría pequeña”.Su aventura en Chile data de hace algunos años, recuerda que se vinculó a Rangers de Talca en 2012, ahí estuvo hasta el año siguiente y también desarrolló una buena campaña.
Admite que hay la posibilidad de renovar contrato, pero que debe analizar muchas cosas. Algunos otros clubes pusieron sus ojos en él. También hay entidades bolivianas interesadas, más después de tremenda campaña.
‘A Soria lo veo muy bien con la Verde’
Dalcio Giovagnoli fue técnico del hoy seleccionador nacional Mauricio Soria en el Wilstermann campeón de 1998, ahí comenzó una amistad que se hizo fuerte con los años.
El DT argentino sabe del presente de quien fue su jugador y dice que lo ve muy metido en su trabajo con la selección, cuyo primer desafío grande será la Copa América que se jugará en Chile del 11 de junio al 4 de julio.
“Por lo que hablé con Soria la otra vez noto que está con una muy buena expectativa con la selección, espero que haga una muy buena Copa; pero hay que ver también que las otras selecciones están en buen nivel”.
Giovagnoli dirigió a la selección como interino en el amistoso que Portugal se impuso 4-0 en Lisboa el 10 de junio de 2003. “Me convocaron para colaborar porque no había un técnico titular y accedí al pedido”, dice.
A propósito del torneo, comentó que no hay mucha expectativa en Chile, señala que tal vez porque el certamen local estaba en fase de decisión y recién acabó ayer.
No sabe cómo está el estadio de Viña del Mar (sus obras estaban atrasadas, ahí jugará Bolivia en su estreno en el certamen), pero sí dijo que vio el de Rancagua, donde jugó hace un par de semanas. “La verdad es que no puse mucha atención en ello, estaba muy ocupado en mi trabajo con el club, pero el de Rancagua está espectacular”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario