jueves, 9 de junio de 2016

El seleccionado transandino se alista para un “encuentro vital”


Los jugadores chilenos en una práctica.

Los mediocampistas y el defensor central de la selección chilena entrenaron separados del resto de sus compañeros en la primera práctica de la selección chilena en Boston, localidad donde este viernes la Roja enfrentará a los altiplánicos en el Gillette Stadium.

La Roja cumplió ayer su primera práctica en Boston, la penúltima antes de enfrentar a Bolivia por la segunda fecha del Grupo D de la Copa Centenario, un duelo vital para ambas escuadras luego de caer en el debut ante Argentina y Panamá respectivamente.

La delegación chilena arribó a Massachusetts, cumpliendo una jornada de descanso para retomar ayer los trabajos. En la sesión, Gary Medel, Marcelo Díaz y Arturo Vidal cumplieron con trabajo diferenciado.

Los mediocampistas realizaron una práctica con menor carga debido al ajetreo cumplido ante Argentina y el viaje desde California a Boston.

Por otro lado, Eugenio Mena, quien presenta un desgarro en el bíceps femoral del isquiotibial derecho, debió limitarse a ver el entrenamiento desde un banco, a espera que los exámenes médicos de hoy establezcan la gravedad de su lesión.

TRANQUILIDAD

El delantero Alexis Sánchez dijo ayer que contra Bolivia, su próximo rival en la Copa América, deberán estar “tranquilos” porque, aunque les esperarán en su campo para salir al contraataque, el gol “llegará” tarde o temprano.

Tras la derrota en su debut frente a Argentina por 2-1, consideró en rueda de prensa que Chile “ahora tiene que jugar al 120 por ciento”, porque son los actuales campeones continentales y tienen “un respeto que mantener”.

“Chile -s quier equipo del mundo y jugamos de por su selección lo da “todo”, por lo que tras la derrota no pudo dormir. “Es mi trabajo -reconoció- pero estoy un poco cansado y espero recuperarme para estar con Bolivia con todas las ganas de poder ganar”

A Alexis le gustaría hacer “tres o cuatro goles por partido”, pero “no es fácil” a su juicio. “No es que tengamos la capacidad de hacer cinco goles por partido o seríamos los campeones del mundo”, dijo.

Defendió a su compañero Arturo Vidal, del que opinó que “es especial. A esos jugadores me gusta tenerlos en mi equipo, entro al campo de juego y Arturo está diciendo ‘lo ganamos, lo ganamos’ y eso me motiva”.

“Sé la calidad de jugadores del equipo -continuó- y confío en ellos. El viernes tenemos que superar este paso, tenemos dos partidos con rivales difíciles y tengo la fe que vamos a pasar esta ronda”.

El internacional chileno es consciente de que tienen que dar “un pasito más” para ganar sus partidos y de que sus aficionados cada vez son más exigentes y eso le motiva y le ayuda a seguir intentándolo.

“Estamos jugando -aseguró- igual que siempre, falta hacer el gol, terminar las jugadas. Yo estoy tranquilo, no pienso en la gente que te critica, no veo esas cosas, trato de salir, de no ver diarios, todo el día fútbol a veces me satura y el día del partido llego más fresco, si no veo nada”. EFE

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